jueves, 3 de junio de 2010

Teta, micro y niños

Si se considera que uno viaja aproximadamente 3 horas, 15 minutos por día, 4 veces a la semana no se puede decir que uno no este acostumbrado a viajar en micro. El punto es que se puede soportar la gorda que te empuja hasta verte caer, los olores ajenos (culo, chivo, mugre, ajo... de todo), el tipo que no quiere cerrar la ventanilla, los chicos de la secundaria gritando desde una punta a la otra o incluso el mal humor del chofer; pero hay algo que no puedo soportar. Ese "algo" se llama nena de 4 años parada chupándole la teta a la madre (aclaro que la teta tenía como una extensión de 20 centrímetros de largo de lo estirada que la tenía) mientras el micro estaba en movimiento. Y mucho menos, tolerar a una nena de 6 años cantando a los gritos canciones evangélicas en mi oído.

Quizás sea bastante intolerante, pero convengamos que entre la teta, los niños y los evangelistas se pusieron de acuerdo para decidirme a agarrar el auto SI O SI.

Fffuuuu...necesitaba decirlo, para poder seguir viendo The Big Band Theory tranquila.

2 comentarios:

El Cid Campeador dijo...

eeeeewwwwww, just... eeeewwwwww

Anónimo dijo...

falto en nene descompuesto que decide dejar su desayuno en tu pantalon!...besos
M.M